Yugoslavia
En cualquier período revolucionario es posible establecer una interrelación entre los cambios culturales -o más bien, de la política cultural- y los fenómenos del cambio político. La materialización de dicho principio es aún más evidente en el período que media entre los años 1868-1874, tanto más, cuanto que es precisamente uno de los rasgos específicos del progresismo liberal de la burguesía del siglo XIx, el deseo, enunciado como principio ideológico, de liberalizar el mundo de la cultura y ponerlo al servicio de una mayor participación social.
La musealización de campos de batalla es un área de trabajo que tiene una larga tradición en otros países como Estados Unidos, Francia, Inglaterra o Alemania, debido a que estos yacimientos arqueológicos forman parte de su patrimonio cultural, y por esta razón son conservados y acondicionados para su visita.
La arqueología de la Guerra Civil Española es una expresión más del campo de la arqueología contemporánea, que estudia las sociedades del presente y del pasado reciente a partir de la cultura material. En el caso de la Guerra Civil, la arqueología puede proporcionar información valiosa sobre as-pectos que han quedado sin tratar en la historiografía y que tienen que ver con la vida cotidiana, la historia cultural de los objetos, episodios bélicos olvidados y la violencia política que quedó oculta por la dictadura.
En vez de ofrecer un recorrido cronológico por el conflicto, esta conferencia se acercará a la Guerra Civil a través de diez objetos recuperados en excavaciones y exhumaciones arqueológicas durante la última década y que cuentan una historia diferente.
Descubrir el lugar de la batalla y los rastros que las tropas dejaron sobre el terreno, conocer mejor cómo se produjeron combates y enfrentamientos armados convertidos en hitos del devenir histórico son algunos de los objetivos de la llamada arqueología de los campos de batalla, una novedosa vertiente temática dentro de la disciplina, que cada día despierta mayor interés.
Con el título Arqueología de las grandes batallas el Museo organiza esta mesa redonda en la que a través de tres conocidos enfrentamientos bélicos se plantean los nuevos enfoques y aportaciones de estos estudios en los últimos años. En esta ocasión el marco cronológico nos conduce a la arqueología de los tiempos más recientes, de la edad contemporánea, a la época medieval.
Medalla conmemorativa Batalla de San Quintín, reverso, MAN
Eduardo Juárez Valero, tratará sobre la Batalla de la Granja (1937), producida en el marco de la Guerra Civil española, y de la propuesta de catalogación de su yacimiento como bien de interés cultural. Por su parte, José Antonio Rebullida Porto, autor del libro recientemente publicado Felipe II y el éxito de San Quintín (1557), hablará sobre esta conocida batalla, un buen ejemplo donde la arqueología se complementa con la investigación histórica para suplir las lagunas documentales e interpretar un acontecimiento bélico trascendental del siglo XVI. Finalmente, la intervención de Mario Ramírez Galán, se centrará en la Batalla de Alarcos (1195), desde una óptica arqueológica y museográfica. Para terminar se expondrán las conclusiones sobre la arqueología de campos de batalla en España y el interés de la musealización de este tipo de yacimientos.
En 1527, 1567 y 1626 se fundan respectivamente los fuertes de Sancti Spiritu (Argentina) y San Juan (EEUU) y la colonia de San Salvador de Quelang (Taiwan). Estos tres acontecimientos y sus rápidos y en ocasiones dramáticos desenlaces representan hitos en la historia transoceánica de la Corona española entre Carlos I y Felipe IV. De la mano de sus excavadores conoceremos los resultados de las intervenciones arqueológicas realizadas en estos tres lugares, yacimientos emblemáticos de un siglo en el que la Corona expandió sus límites más allá de lo imaginable y cuyas consecuencias modelaron la historia de la humanidad en la Edad Moderna.
Con motivo de la conmemoración del 450 aniversario del triunfo de las tropas españolas en la batalla de Lepanto, esta jornada trata de poner en valor uno de los acontecimientos más relevantes de la historia naval moderna. Las dos armadas más poderosas de su tiempo, la turca-otomana y la conocida como Santa Liga, se enfrentaron en una lucha sin cuartel por el control del Mediterráneo. Un acontecimiento sin parangón, fuente de inspiración de las artes y la literartura y que el mismo Miguel Cervantes, quien participaría como soldado, definió como “la más alta ocasión que vieron los tiempos”.
Entre 1640 y 1668 tuvo lugar la Guerra de la Restauração Portuguesa, que se inició tras la proclamación del Duque de Bragança como João IV y finalizó con la independencia de Portugal. La primera consecuencia fue la construcción de una red defensiva fronteriza que modernizaba la red de castillos medievales, dando lugar a un nuevo paisaje que materializaba los principios de la fortificación abaluartada. Desde diversos proyectos de investigación, se ha analizado arqueológicamente la frontera galaico-portuguesa, lo que no ha permitido comprender el sistema defensivo que se gestó a partir de 1640 y siguió transformándose en los siglos posteriores.
El presente artículo trata de una cabezada nazarí del siglo xv, para la mula de una joven mora, hija del Alcaide de Serón (Almería), que se dirigía con su comitiva a Baza (Granada) para casarse. Cuarenta jóvenes caballeros de Lorca salieron de noche con el propósito de conquistar gloria y honor, al mando de D. Diego López de Guevara. Emboscados a cubierto, cerca del camino, acosaron a la comitiva, aniquilando a unos y haciendo prisioneros a otros, entre ellos a la joven novia, que finalmente fue liberada. En agradecimiento regaló al jefe lorquino una joya de oro y pedrería, que llevaba en el pecho, y la cabezada. Este tipo de arnés nazarí era muy preciado, y como tal se documenta entre las preseas de la Reina Isabel la Católica.
El estudio de la fortaleza ha revelado su importancia como una de las fortificaciones cristianas más antiguas e importantes de Europa. Construido hacia el año 930 por el rey Ramiro II de León sirvió como frontera de la cristiandad frente al poder del Califato de Córdoba. El complejo proceso evolutivo de su fábrica, las extraordinarias cualidades constructivas ramirenses y la excepcionalidad y sofisticación tecnológica de sus saeteras de defensa son algunos de los elementos sobre los que pivotan las actuales propuestas de estudio y recuperación que el Plan Director contiene.