Hasta la década de 1970 las fábricas de indianas del siglo XVIII habían constituido la continuidad de la industria catalana durante el siglo XIX. En este sentido, la industrialización catalana no responde a un modelo exclusivo barcelonés, sino que surgió como una respuesta a las diversas estructuras productivas del territorio combinando la nueva fibra junto a las nuevas tecnologías. No obstante, el algodón reforzó a Barcelona en la industria al ser el punto de entrada y distribución. La geografía de la hilatura del algodón se completaba con otra geografía del tejido: el manual. Hilatura y tisaje, por lo menos en la Cataluña de las bergadanas, eran dos caras de la misma moneda. Hilatura y tisaje se complementaban, aunque el peso del tejido no coincida con el de la hilatura. Por tanto, es necesario colocar la tisaje manual en el lugar que le corresponde utilizando como punto de partida las estadísticas sobre Cataluña en 1841.
Colección: Estadísticas
Proyecto: 2. Impacto social y económico de las revoluciones tecnológicas en Europa., 9. Viajes y viajeros: conexiones económicas, sociales y culturales.
Cronología: XVIII, XIX
Ámbito: Educación Secundaria, Bachillerato, Universidad
Tipo de recurso: Estadística
Formato: Tabla
Fuente: Ferrer i Alòs, Llorenç, «Bergadanas, continuas y mules. Tres geografías de la hilatura del algodón en Cataluña (1790–1830)», Revista de Historia Económica, Journal of Iberian and Latin American Economic History, 22, 2 (2004), pp. 337–386.
Idioma: Castellano
Fecha: 2004
Propietario: Álvaro Romero González (Modernalia)
Copyright: © Llorenç Ferrer i Alòs, © Revista de Historia Económica
Resumen: Establecimietnos en Barcelona, Gerona y Lleida de los telares en 1841
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